Sí, yo soy otro de decepcionado de las decisiones de nuestras autoridades que curan un cáncer con un curita y paracetamol. No se van a las raíces del problema de la contaminación ambiental y se van por la fácil; ampliar el Hoy no Circula. Esto resulta frustrante porque vemos que otras urbes que avanzan a saltos en su camino a ser Smart Cities y aquí volvimos a los 90.
Los actuales gobernantes de nuestra ciudad piensan que fomentar el uso de la bicicleta es lo más chido. Eso es una minucia respecto a las ciudades inteligentes del mundo. Allá tienen semáforos inteligentes con medidores de tráfico, aquí no sirven o no están sincronizados. En otros lugares usan autopistas urbanas con telepeaje automatizado de primera con antenas tipo carrier y servidores tipo datacenter. Aquí los tags son un chiste que solo se leen viajando a menos de 20 kilometros por hora. Allá los automovilistas pueden usar las rutas del metrobús con un peaje alto que financian más transporte público. Acá las vías de cuota se entregan a churumbeles.
En el primer mundo usan la radio digital para dar reportes de tráfico en tiempo real, acá no hay y hasta nos quitan carriles en vías rápidas. Allá usan intensivamente apps como Uber, Cabify, Yaxi, EasyTaxi, Buggy Rides, Blablacar, Carrot o Moovit. Acá no todos pueden pagar internet móvil. En otros lugares el transporte público es decente, medible, configurable, exacto y hasta eléctrico. Acá es sucio, precario, inexacto, contaminante y se grillan proyectos como el del tranvía de la Ciudad de México. Allá se usa gas natural, aquí seguimos con nuestros vetustos cilindros y sin dejar abrir las calles.
Pero hay medidas que no implican tanta tecnología sino simplemente un poco de sesos y producto de gallina. Uno es establecer el teleworking y el homeoffice sobre todo entre aquellos que cobran por horas nalga. Fijar horarios escalonados para el inicio de actividades laborales o descentralizar los sitios de trabajo en dependencias públicas. Uno más, limitar ¡ya! la construcción indiscriminada de torres enormes con cientos de huevo-departamentos. Frenar la violación de usos de suelo para convertir colonias habitacionales en zonas comerciales o mixtas. Ya no caben más edificios de departamentos con sus respectivos autos, ya párenle por favor, no manchen.
Los ricos también lloran
Por cierto, hasta en Lomas de Chapultepec se quejan pues les piensan construir un edificio de departamentos donde solo hay casas. Se trata del predio de Sierra Amatepec 263 cuyo uso de suelo ha sido para casa habitación. Sin embargo, el magistrado Francisco Barba Lozano, podría hacerle el paro a Humberto Artigas (toallagate) para que construya el edificio. El magistrado del DF avaló un Certificado de Acreditación de Derechos Adquiridos para cambiar el uso de suelo y permitir la obra. Lo anterior es raro porque ese predio nunca ha sido utilizado para seis viviendas en cuatro niveles, como quiere hacer parecer Artigas. La casa que estuvo allí desde 1957 y fue demolida a finales de 2005 pero nunca estuvo integrada por departamentos. ¿Entonces, habrá algo más?
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