Con este acuerdo comercial entre ambas empresas, se declara la tregua en la guerra precios por controlar el transporte privado en el “Gigante Rojo”, además que dicha transacción se estimasen poco más de 32 mil millones dólares. Por su parte, Didi Chuxing controlará la mayor red de transporte privado, provocando un mayor descontento entre los taxistas chinos.
Para Uber China esta transacción significa tener un 20% de participación dentro del nuevo gran conglomerado de transporte, mientras que para Didi Chuxing hará una inversión de mil millones de dólares a nivel global para impulsar las operaciones de Uber.
Sin embargo, ambas empresas salen ganando, pues su férrea competencia en el precio del transporte de los pasajeros chinos, significo una importante reducción en sus precios; afectaban de manera importante sus ganancias. Se estima que durante los dos últimos años Uber invirtió importantes sumas de dinero en China, mismo que no se vio reflejado con incremento de usuarios en dicho país.
Los expertos calculan que las operaciones de la local Didi Chuxing cuestan alrededor de los 28 mil millones de dólares, mientras que las de Uber rondan los 7 mil millones de dólares. No obstante, los capitaneados por Travis Kalanick, seguirán operando con su propia marca y app, además, Kalanick tendrá un asiento en el consejo de Didi Chuxing, mientras que el Presidente de la empresa de transporte china, Cheng Wei, ocupará un asiento en la junta directiva de Uber.
Por si fuera poco, Didi Chuxing sigue su afán de posicionarse como el número uno en el servicio de vehículos de alquiler en tiempo real, pues financió en la India a la compañía Ola, apoyó a la app Grab e invirtió poco más de 91 millones de dólares en la empresa Lyft, que curiosamente es la principal competencia de Uber en los Estados Unidos.
Foto: Cortesía de Uber
GAEL
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