Cuando supe que la Coparmex, en voz de su presidente, Juan Pablo Castañón, dijo que buscaría a las autoridades del Servicio de Administración Tributaria (SAT) para pedir una prórroga en favor de los pobrecitos microempresarios que no estarían listos para emitir y recibir solo facturas electrónicas a partir del 1 de enero próximo, lo único que se me ocurrió decir (con todo respeto): ¡Ay, no manchen! ¿Y su nieve, de qué sabor la quieren?
Me parece inverosímil saber que a unos cuantos días de que entre en vigor la medida, el que se supone es el empresariado formal, los que deben predicar con el ejemplo, se atrevan a pedir una prórroga a una medida fiscal de la cual ya estaban avisados no desde hace seis meses ni un año, sino desde hace nueve (2004) y que se puso en marcha desde hace casi tres (2011).
Pero lo peor fue conocer los argumentos de los empresarios, quienes decían que miles de pequeñas empresas no estarían listas con “toda la infraestructura” para tener su comprobante fiscal digital por internet (CFDI), cuando se trata de un proceso de lo más sencillo (obvio, si te encuentras al corriente en tus declaraciones) y que incluso solo se requiere de un acceso a internet.
Aceptando sin conceder que para un micronegocio resulta muy complicado comprar una PC, conectarla a internet, instalarle un programa y llevar un control de inventarios, ingresos y egresos, con todo gusto sugiero a los microempresarios rezagados que se acerquen a GS1 México, el organismo internacional promotor de estándares de negocios electrónicos e impulsor de la factura electrónica que dirige Miguel Ángel Peralta, donde no solo recibirán orientación, sino que hasta en su Centro de Conocimiento encontrarán una bonita demo sobre cómo convertir un negocio tradicional en uno digital en dos o tres patadas y en cómodas mensualidades.
Ahora bien, si ya tienen algo de toooda esa “gran tecnología” que se requiere para facturar digitalmente, basta con contratar a un proveedor autorizado de certificación (PAC) que ya hasta lo ofrece Telmex (muy caro por cierto) o bien utilizar la herramienta gratuita que está en la página web del SAT.
En el mercado hay varias empresas que ya ofrecen estos servicios, una de ellas (mexicana, por cierto) es Next-Technologies, dirigida porMauricio Cortázar, que ofrece soluciones para lo relacionado con facturación electrónica. Existe la muy conocida Aspel, pero por ejemplo Next-Technologies propone su Facturaweb dirigido a profesionistas y Pyme, un producto que debes revisar.
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