Redacción
El estudio de Visa Inc. titulado Impacto de los pagos electrónicos en el crecimiento económico, reveló que un mayor uso de los productos de pago electrónico en 70 países analizados, incluidas tarjetas de crédito, débito y prepagadas, aportó al PIB de esas naciones 296 mil millones de dólares, al tiempo que elevó el consumo hogareño de bienes y servicios en un promedio anual del 0.18 por ciento.
El estudio realizado por Moody's Analytics a solicitud de Visa, la empresa de tecnología de pagos, analizó el impacto de los pagos electrónicos en el crecimiento económico de esos países en el período 2011-2015.
En un comunicado, Visa informó que se generaron aproximadamente 2 millones 600 mil puestos de trabajo nuevos en promedio por año durante el período analizado, como resultado de un mayor uso de los pagos electrónicos. Los 70 países analizados en el estudio conforman prácticamente el 95 por ciento del PIB global.
Los pagos electrónicos contribuyen de manera importante al consumo, a una mayor producción, al crecimiento económico y a la generación de empleo. Los países que presentaron grandes aumentos en el uso de la tarjeta también tuvieron mayores aportes al crecimiento en general de sus economías, señaló Moody´s Analytics. El informe también mostró que los pagos electrónicos beneficiaron a los gobiernos y contribuyó a un ambiente empresarial más estable y abierto.
Asimismo, los pagos electrónicos ayudaron a minimizar lo que se conoce comúnmente como la economía informal, actividad económica a menudo basada en el efectivo y que no se declara. Como resultado de ello, los pagos electrónicos proporcionaron una base de ingresos fiscales de mayor potencial para los gobiernos, al tiempo que añadieron beneficios debido a costos más bajos en el manejo de efectivo, pago garantizado a los comercios y una mayor inclusión financiera para los consumidores.
El estudio destaca, entre otros puntos, la penetración de las tarjetas. Se observa un crecimiento del consumo real a un promedio del 2.3 por ciento del 2011 al 2015; de los cuales el 0.01 por ciento es atribuible a una mayor penetración de la tarjeta. Ello implica que el uso de la tarjeta representó aproximadamente 0.4 por ciento de crecimiento en el consumo. Debido a que el crecimiento del consumo es, en promedio, más rápido en las economías emergentes, esos países también tienen más para ganar aumentando el uso de la tarjeta.
Los países con los aumentos más importantes en el uso de la tarjeta experimentaron los mayores aportes al crecimiento, por ejemplo, los grandes aumentos en el PIB se registraron en Hungría (0.25%), en los Emiratos Árabes Unidos (0.23%), en Chile (0.23%), en Irlanda (0.2%), en Polonia (0.19%) y en Australia (0.19%). En la mayoría de los países, el uso de la tarjeta aumentó independientemente del desempeño económico.
Con relación al empleo, señala que los dos países con mayores aumentos de puestos de trabajo en promedio fueron China (427 mil puestos de trabajo aportados) e India (336 mil) y ambos tuvieron grandes ganancias en empleo debido a la combinación de una productividad laboral de rápido crecimiento y un mayor uso de la tarjeta.
La investigación destaca que la expansión de los pagos electrónicos sola no necesariamente incrementará la prosperidad de un país, pues se requiere del respaldo de un sistema financiero bien desarrollado y una economía saludable para lograr el máximo impacto. El informe recomienda, a un nivel macro, promover más los pagos electrónicos ; los países deben alentar políticas que minimicen las reglamentaciones innecesarias, creen una infraestructura financiera sólida y lleven a un mayor consumo.
MLMB
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