Llevo varios días dándole vueltas al tema de la televisión abierta, la publicidad, los medios emergentes y negocios disruptivos. Aun no entendía cómo es que la TV abierta en México sigue siendo el más influyente entre la población mexicana y con mayores presupuestos. Ahora creo entender algunas cosas.
Sigue siendo el más fuerte porque la conectividad en el país es baja y porque sigue siendo el principal medio para campañas masivas. Los medios emergentes e internet siguen al alza sin embargo, no son los más adecuados para mensajeas masivos pues su fuerte está en el nicho. Luego entonces, ¿qué interesa más a un anunciante, ser masivo o ir a los nichos? Yo creo que debe mezclar los dos.
No obstante, los presupuestos no crecen, son los mismos y esto obliga a quitarle a uno para darle a otros, pero ¿cómo tomas esa decisión? Unos piensan que la única manera de medir el impacto de un mensaje es tomando como base los ratings. Yo no estoy de acuerdo. Lo importante es tener una métrica de conversión, es decir; medir con certeza la relación que hay entre un mensaje masivo y la compra. Hay quienes piensan que eso es imposible porque el rating es una simple muestra estadística pero, ¿Si hubiera un nuevo método? ¿Si pudiéramos acabar con la tiranía del rating?
Ya hay manera de saberlo cruzando múltiples fuentes de información y sensores. Ahora es posible usando horarios, puntos de acceso, métodos de pago, tiempo de exposición y hasta posición geo referenciada y peoplemetters. Yo sé quién lo hace y pronto te diré cómo.
Domingo gris
¿Se cayó un satélite? ¿Se le retiró la concesión a un operador? ¿Se apagó por horas la red de alguna empresa de telecomunicaciones? ¿Se cayó un canal de televisión abierta? No, simplemente se trató (torpemente) de ganarle el mensaje a la industria que se quejará de fallas en el apagón analógico.
Qué bueno que no desperdicié mi domingo para oír lo que nunca debimos escuchar: explicaciones sobre el apagón en Monterrey. Al son de “Yo no fui, fue teté”, “A mí que esculquen” y hasta “¿Y yo por qué?”, ayer el regulador se desmarcó del complicado apagón regio. No fue para dar una gran noticia, solamente fue una (mala) estrategia para adelantarse a lo que este mediodía dirá la CIRT. En unas horas la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión explicará por qué suman un millón de regios sin TV abierta.
Me parece un cañón cebado, un desperdicio de lluviosas y dominicales horas del @IFT_Mx y la @SCT_MX para salir a decir: somos un éxito.
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