De acuerdo al Departamento de Estado estadounidense, en 2014 ocurrieron un total de 13,463 ataques terroristas en todo el mundo, lo que resultó en más de 32,700 muertos y más de 34,700 heridos. Además, más de 9,400 personas fueron secuestradas o tomadas como rehenes.
Y, de acuerdo al antes mencionado Departamento de Estado, “el número total de ataques terroristas en 2015 disminuyó en un 13 por ciento en comparación con 2014. Las muertes totales debido a los ataques terroristas se redujeron en un 14 por ciento, principalmente como resultado de un menor número de ataques y muertes en Irak, Pakistán y Nigeria. Esto representa la primera caída en el total de ataques terroristas y víctimas mortales del terrorismo en todo el mundo desde el año 2012. Al mismo tiempo, hubo varios países, entre ellos Afganistán, Bangladesh, Egipto, Siria y Turquía, donde los ataques terroristas y las muertes totales aumentaron en 2015. Aunque los ataques terroristas se llevaron a cabo en 92 países en 2015, se concentraron geográficamente, como ha ocurrido durante los últimos años. Más del 55 por ciento de todos los ataques se llevaron a cabo en cinco países: Irak, Afganistán, Pakistán, India y Nigeria. Y el 74 por ciento de todas las muertes debidas a ataques terroristas ocurrieron en cinco países: Irak, Afganistán, Nigeria, Siria y Pakistán”.
Tenemos entonces que el año pasado se cometieron 11,713 ataques terroristas que dejaron 28,122 muertos. A pesar del descenso en relación a 2014 los números siguen siendo impresionantes.
La información arriba anotada debe servirle a quienes planean viajar en un futuro cercano a cualquier país fuera del Medio Oriente o Nigeria y que estén preocupados de que puedan a llegar a ser víctimas de un ataque terrorista. Si la analizan verán que las probabilidades de ser muerto o herido por un terrorista son mínimas.
Veamos algunos datos que se aplican a los estadounidenses, quienes viajan en mayores números que los mexicanos:
En 2014 solo hubo 25 estadounidenses no combatientes que murieron en actos terroristas. Es más, la principal causa de muertes de estadounidenses fuera de su país fueron los accidentes automovilísticos.
Otro dato, un habitante de Estados Unidos tiene 35,079 más probabilidades de morir de enfermedades del corazón que de un ataque terrorista, 33,842 más probabilidades de morir de cáncer, 23,528 más probabilidades de morir por efectos de obesidad, 5,282 más probabilidades de morir por un error médico 2,059 más probabilidades de morir por suicidio, 452 más probabilidades de morir de una enfermedad de transmisión sexual, 271 más probabilidades de morir por un accidente en el lugar de su trabajo, 187 más probabilidades de morir por deficiencias nutricionales, 110 más probabilidades de morir por consumir comida contaminada y 9 veces más probabilidades de morir a manos de un policía.
En conclusión, si te preguntas si viajar o no viajar este año a la mayoría de los destinos turísticos del planeta, contéstate que sí y vete tranquilo. Eso sí, cuídate de los policías en Estados Unidos.
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