Faltan más torres buena onda, columna COMPLETA de @hugogonzalez1 en @milenio

No soy un tipo bienpensante que por todo arma un pancho y por el contrario, creo que el progreso conlleva pagar algunas facturas. En ese sentido no simpatizo con las ideas menonitas y pachecas de aquellos que si pudieran, destruirían todo lo que haya creado el hombre. A esos yo los llamo ecoterroristas. Dan más miedo que ciertos fundamentalistas religiosos pues lo mismo atacan cultivos genéticos que torres de telecomunicaciones.

Lo aclaro porque mi columna del miércoles cuestioné una abusiva colocación de una antena en Tlalnepantla en el Estado de México. Eso no quiere decir que me opongo a las antenas, por el contrario creo que hacen falta más, pero lo que no me gusta son las antenas mala onda. Coincido con directivos de AT&T y Telefónica quienes dicen que se necesita homologar en el país la regulación para esa infraestructura. No es posible que de un municipio a otro cambien tanto las reglas para instalar antenas.

Yo tampoco entiendo a los usuarios que se quejan de un mal servicio móvil pero se oponen a la instalación de más antenas. Sin embargo, creo que en México no aplican la técnica de las antenas buena onda de Perú y por el contrario las empresas abusan. Las "torreras" usan argumentos incompletos pues aunque tienen los permisos para instalar torres, adolecen de una adecuada gestión social. No informan, ni convencen a los vecinos, solamente se imponen a billetazos.

Eso es malo para la industria y por eso ahora pocas personas las ven con afecto y aunque tengan la razón jurídica no tienen la razón moral. Al respecto llama la atención que en el caso de los deslaves de Santa Fe, la empresa American Tower ya pasó de ser acusada a ser acusadora. En días pasados presentaron una denuncia penal contra quien resulte responsable ante la Procuraduría de Justicia de Distrito Federal.

Su defensa es Requena Abogados, del penalista Carlos Requena, y argumenta que la torre tenía más de 19 años en operación sin problemas. Dice que desde su inicio contaba con licencia de construcción, manifestación de terminación de obra y autorización de uso y ocupación. Incluso tiene autorización de la Dirección de Aeronáutica Civil.

Por cierto, afirma que el peso de la antena es similar al de tres camionetas estacionadas una al lado de la otra. En la denuncia penal también se pide a las autoridades se investiguen las edificaciones y construcciones en los alrededores de la antena.

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